lunes, 1 de septiembre de 2008

lunes, primero de septiembre.
muy pocos estaran a la hora que tienen que estar.
luego llegaran las habituales disculpas.... los niños, el trafico, la vuelta de vacaciones..
sin embargo, cuando la actividad laboral incluye –al menos presuntamente- tratar con algun tipo de publico, el retraso de unos se convierte, de forma automatica, en trabajo acumulado para los demas.
los galos tenian una costumbre extraña, -pero terriblemente efectiva- para evitar los retrasos, una convincente formula que hacia que todos estuvieran en su sitio y a su hora.
consistia en matar, sin excepcion, al ultimo que llegaba.
quizas un tanto radical, pero hay que reconocer que muy, pero que muy, efectiva.
nunca hay que subestimar a un jefe cabreado.

Sarita Amon
sarita-amon.blogspot.com