viernes, 11 de septiembre de 2009

La frenetica actividad que he desplegado a lo largo y ancho de estos dias de vacaciones me ha permitido observar -con mas detalle- uno de esos profundos comportamientos adquiridos, fruto, sin duda, del impecable y cabal perfeccionamiento humano gestado a traves de siglos y siglos de civilizacion.



los hombres cogen el mando de la tele y empiezan a apretar el boton.. , la uno, la dos, la tres, la cuatro, la cinco, la seis...; un suspiro y un resignado comentario..... " pero si no echan nada en ninguna ".



Aun asi, y antes de que pasen tres segundos, vuelven a apretar el boton.. la seis, la cinco, la cuatro, la tres, la dos, la uno... y ! oh caspitas !, ¡ pero si siguen sin echar nada en ninguna !



El ilimitado numero de veces en que he podido estudiar dicho comportamiento unido a las pocas variables introducidas en su desarrollo, hace que la conclusion de un acto tan extendido deje poco margen estadistico al error: son idiotas ( con perdon )

jajajajujujijijajaja



Sarita Amon