LOS PELIGROS DEL OLVIDO.....


Sin el olvido no pudiéramos vivir. Es nuestro mejor escudo. Si no olvidàramos agravios, dolores, fracasos, vergüenzas, sinsabores, pobre de nosotros.

La vida està muy llena de encontronazos y desconciertos, que a cada paso que damos nos asaltan y desarman para arriba de eso tener tambièn que ir acumulando en un interminable- siempre presente-, todos los filos que en el pasado nos han herido y desangrado. Todos los salivazos recibidos. todas las afrentas.

Asì, se nos harìa insufrible la existencia. Imposible de soportar, y por ello olvidamos. Y por eso, sumergimos en el subconsciente, sin darnos cuenta siquiera, un bagaje enorme de espectros, terrores y arañas que han escarceado y aruñando sin piedad nuestra vida.

A veces sucede que reviven en nuestros sueños nocturnos, y te tenemos pesadillas.

Otras veces, algunos de esos fantasmas horrorosos no han sido lo suficientemente domeñados en el fondo de nuestro inconsciente y, sin darnos cuenta crecen monstruosamente y se agigantan en nuestro interior como cànceres mil veces mas terribles, dolorosos y espeluznantes que los somàticos, haciendo de hacedores de neuràstenicos psicòpatas, que solo tràs largas y tediosas sesiones en el diván del psiquiatra o del psiconalista, al lograr una explosiva catarsis con muchos gritos y llantos es, su infeliz ìntima capaz de volver en sì, ser otro hombre y recuperarse.

Por fortuna en la inmensa mayorìa de las personas, el mecanismo defensivo del olvido se cumple sin mas contratiempos.

El olvido se parece, o es como el FAGOCITO de la mente, el anti-cuerpo del espìritu. Un anti-cuerpo que no funciona en el torrente sanguìneo, sino en el cerebro donde se traga y sepulta las memorias que no nos son desagradables, sujetàndolas al arbitrio del buen sentido, aunque no sea capaz de aniquilarlas del TODO.

Y, si bien el olvidar nos mantiene vivos, como caminar, respirar, comer, dormir, en exceso, como todo, nos perjudica y mucho.

Cualquier contratiempo pasado, puede haber sido algo serio, pero la benevola "piraña" del olvido se lo tragò, o se lo està tragando poco a poco.....

Sarita Amon