viernes, 26 de septiembre de 2008

conjunto de plumas sujetas a un mango para limpiar el polvo.


como casi todos, supo tener su momento de anormalidad, se enamoro de un plumero.

es sumamente extraño que los plumeros hablen ( este hablaba ), demasiado para mi gusto.

ella aburrida de tanto adoquin con pelo, se enamoro perdidamente del plumero y llego a confiar mas en las plumiferas palabras que en la propias.

la vida de los plumeros no es muy divertida aunque se muevan, revuelen al viento las plumas o tengan simpaticos ataques de locura, por eso cuando ella lo mostraba orgullosa a sus amistades ( hasta llego a presentarselo a su contador ), el plumero creyo conseguir una posicion, digamos, humana.

era como una nueva ( y bizarra ) version del pinocho mal herido y ella su hada protectora.

fueron excesivamente felices hasta que ella comenzo a medicarse bien.

las opiniones del plumero comenzaron a fastidiarla cuando se convencio de ser un plumista y quiso convencerla a ella.

una noche, cuando la habia envuelto completamente con sus plumas para protegerla de una supuesta bomba atomica que caeria cerca, aparecio el primer estornudo.

ya nada volvio a ser igual porque era verlo y estornudar.

la plumosa realidad le genero alergia y se dejaron de ver por prescripcion médica.

parece que el plumero todavia la extraña y cuando los plumeros extrañan se transforman en plumbeos.

parece que ella encontro un guante de microfibra que canta unas canciones hermosas.

Sarita Amon
sarita-amon.blogspot.com