esto me lo envio mi amigo CHESCO
un hombre del pueblo de Negua, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
a la vuelta, conto.
dijo que habia contemplado, desde alla arriba, la vida humana.
y dijo que somos un mar de fueguitos.
-el mundo es eso -revelo-.
un monton de gente, un mar de fueguitos.
cada persona brilla con luz propia entre todas las demas.
no hay dos fuegos iguales.
hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores.
hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.
algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
sarita-amon.blogspot.com