lunes, 1 de diciembre de 2008

en ocasiones son esos pequeños detalles aparentemente absurdos, esos que se acumulan y que no resultan canjeables en ninguna parte, los que se quedan tatuados en la memoria, una frase, una sonrisa, un instante de complicidad.

el tiempo sigue su curso, los rios de la conciencia se multiplican, miras atras y un recuerdo salta, lo miras sonries, un pequeño detalle al que incluso no le diste tanto valor como ahora observas, miras de nuevo y salta otro.

y las paginas de tu vida se llenan de matices, detalles que solo son tuyos, puedes compartirlos pero son tuyos, eres tu quien fue capaz de apreciarlos y quedarte con ellos.

atesoro pinceladas, trazos aparentemente insignificantes, congelo en mi mente el instante justo en que mi mundo necesitaba parar y fotografiar un momento, retenerlo, quedarmelo para siempre.

delicias de caramelo envueltas en dias radiantes, aunque no brille el sol.

Sarita Amon